Gemelos enfrentados...

Duele tanto ver cómo nos arrebatan algo que significaba tanto para nosotros... aunque sea tan sólo un recuerdo o una ilusión.. (pues toda realidad pasada ya no es más que polvo... no existe y casi que nos hace dudar de si existió alguna vez).

Vuelve la crisis de irrealidad... Quizás exagero un poco.. no es tanto como eso.. pero sí es un sentimiento de vacío.. Antes había un trocito de mi alma (de mi mente, más bien, dado que eso del alma no se sabe muy bien dónde queda para un ateo)... ocupado por una sombra...

Hubo una vez un Lobo... que, contra todo pronóstico, era observado con embelesamiento por la Luna... Desapareció... Pero la Luna siguió llenando sus ojos con el hueco que había dejado su sombra... y lo miraba, día tras día... Ignorando incluso al verdadero Lobo que de vez en cuando se cruzaba frente a los ojos de ella... La Luna ya no conocía al Lobo, pero pensaba que estaba escondido, oculto, y que nadie lo conocía porque nadie veía que volvería.. Que su Lobo no había dejado de existir, sino que sólo había desaparecido momentáneamente..
Pero la Luna se engañaba.. se engañó... me engaño... Ya no sé si siempre me estuve engañando, mirando el reflejo de lo que quería ver, o si es que el Lobo perdió la cabeza y se convirtió en Sapo.. Ni sapo, diría yo... No sé en qué te has convertido... No te reconozco.. Y no me reconozco en esa Luna que tanto soñó contigo... No comprendo el hueco que llenabas.. Y no sé dónde ha quedado el vacío que debiste dejar...

¿Existió alguna vez? Quizás fue siempre así... aunque siempre invisible para la Luna... La perpetua función teatral nunca acabada.. El eterno retorno... al absurdo.